"Donde el espíritu intangible busca plasmar lo que palabras sin sentido intentan decir."


lunes, 25 de marzo de 2013

Por un instante

Por un instante en la vida mi visión se detuvo, el ruido se fundió entre mis pensamientos generando una satisfactoria visión estática llena de silencio la cual me insitó a esta vacía expresión. Me recordó cuan importante es la tranquilidad en la vida, liberando las presiones pude ver como mi espíritu perdía peso, como mi andar se volvía ligero y como mis pensamientos desaparecían en un cielo despejado.

Pude sentir el viento acariciando frescamente mi piel y como mi pelo bailaba en torno a ritmo ausente de sonido pero lleno de profundidad, en mi vida nunca pude apreciar cuan brillante era el sol que brillabas como en ese momento.

Hacía algún tiempo que no charlábamos, que no nos dábamos un tiempo para conocernos, y ahora que lo tuve pude verte en mi mostrándome un camino menos abrumador que el que recorrí durante tanto.

Conforme camináramos pude notar como te obsesiona el tiempo y como me fastidia la ausencia.

Terminamos nuestro andar me encontré un espejo que me miraba curioso, sabía que es lo que tenía que hacer, era un momento único, me despedí de mi mismo y caminé frente al espejo para volver a ser yo.

Sintiéndome completo una vez más y sin más oscuridad en mi rostro sin importar cuan fuerte era la fuente de luz decidí que era momento de volver.

Miré mi cuerpo inmóvil recargado en la pared e hice el último enlace, finalmente chasquee mis dedos y el flujo volvió a la normalidad.

viernes, 22 de marzo de 2013

Nuestro andar


Montado en el viento viaja despreocupado cierto individuo mirando asombrado como su realidad cambia esporádicamente mientras su ser se eleva más y más en lo mas profundo de su mente, puede visualidad con facilidad en un río de recuerdos los momentos mas importantes de su vida. Llega al momento más luminoso hasta desaparecer todo y en un parpadeo ya no se encuentra en la existencia, a llegado a la zona más intima, no parece tocar el suelo, y esque este no es pues se encuentra flotando en un mar calmado que permanece en completa quietud ante su presencia. Allá donde el horizonte escasea puede visualizar un punto diminuto, corre hacía él esperando encontrar una respuesta pero no parece acercarse. Se detiene, abre su boca en ira pero las palabras no fluyen en su boca, víctima de la frustración se deja caer al mar pero no lo azota, su posición no cambia en lo absoluto haga lo que haga, estira su mano en desesperación y toma ese punto con el puño. Cuando lo abre descubre su escencia, una puerta, la abre y la atraviesa ansioso, tan pronto llega al otro lado siente como su ser se se filtra entre las nubes para llover allá en la cima más alta de la creación. Es el comienzo de un ciclo que talvez nunca tuvo principio, un circulo destinado a girar eternamente en el vacío que es la vida cuando dejamos que la interperie determine nuestro andar.