Camino en un pasillo lleno de espejos, mirando solo al frente, con la esperanza que cruzando la puerta este la tan ansiada situación. Llego al lugar indicado y al abrir la puerta encuentro con un largo pasillo, conforme camino del techo la luz se vuelve más intensa y me doy cuenta que camino en un pasillo lleno de espejos, mirando solo al frente esperando la tan ansiada situación, a lo lejos el brillo inconfundible de una puerta eufórica, conoce mi destino, cada paso me acerca más o hace todo lo contrario pues siento que me hundo en cada paso, regresar no es una opción mi cuerpo no conoce el retorno, camina sin cesar hacia delante. Se adentra a un océano blanco bañado de espejos en los cuales no puedo distinguir siquiera mi figura, mientras me pierdo pensando que si fuimos todo un producto de mi imaginación y estoy por entrar al mundo real o si soy yo producto de la tuya y lentamente me dejas en el olvido.
jueves, 2 de enero de 2014
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