Después de una gran travesía, ha decidido volver, todos los puentes que contruyó para cruzarlos pronto dejarán de existir, probablemente sea precisamente la misma persona la que los destruirá.
"Lo siento, pero ya no quiero encontrarte, hasta nunca tierras lejanas que jamás conoceré."
Es lo mejor, el cañón que rodea su isla es la distancia perfecta para poder admirarlas desde lo lejos. No estaba destinado a conocerlas, solo causaría estragos, destruiría su ecosistema. No era su entorno y admitirlo era tan doloroso.
Su andar quedó marcado por lágrimas que no pudo llorar.
Se detuvo antes de entrar a su cueva, miró al cielo y vió humo, esto lo inquietó y subió como pudo a su árbol y entonces pudo ver como el fuego consumia aquellas tierras. Bajó de inmediato y corrió hacía su cueva, las lágrimas pesaban en su cabeza y perdió el balance, cayó en la eterna obscuridad de su antiguo hogar, del cual, talvez jamas logre salir.
"Supongo que es la distancia no se, talvez sea el frío, o mi incapacidad, esta deformidad mental que no me deja... que me detiene y me impide volver a intentar, tal vez es el destino, no lo se, jamás he sido ni siquiera por un momento o un poco más que nada bueno para los sonidos bocales, es por eso que solo "escucharas" de mí leyendo estos recuerdos."
Escribe con ansiedad en la pared mientras voltea y percibe el vacío jamás ha dejado de sentir internamente mientras la tenue luz del atardecer desaparece lentamente abandonándolo una vez mas.
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